Cada año, decenas de miles de ciudadanos regresan a Filadelfia desde las prisiones federales, estatales y del condado. Debemos hacer mucho más para ayudar a estabilizar a las familias durante los períodos de encarcelamiento y asegurarnos de que los ciudadanos que regresan vuelvan a tener trabajos para mantener a sus familias, oportunidades de capacitación y viviendas asequibles. Dadas las desigualdades históricas, debemos examinar cada coyuntura en el sistema legal penal para incorporar más prácticas restaurativas, garantizar un trato humano y apoyar a los ciudadanos que regresan.